Te he visto tantas veces que me olvido de ti cuando me voy.
Solo tengo que hacer una cosa:
hundirme en ti.
Volver. ¿Para qué?
Reprochas, rechazas, me río, prometo
ya no más
pero las idas y vueltas se suceden
¿Dejaré alguna vez de regresar?
Dulce en la memoria, en el encuentro hosco
y así me llamas
yo encamino mi ilusión hacia ti,
¿a qué viene tanto rencor?
sabes que el corazón es grande
han germinado las otras.
También grito si no te tengo.
La felicidad es espuma salada
alimento el trueno y la debilidad de las ramas,
pero hago lo mejor que puedo
incluso en la ansiedad encuentro tu respiración.
No te das cuenta, siempre me llamas.
Voy.
Coge mi mano fuerte
sé que la jodí, estabas preparado.
Volví.
No tomes mi tristeza por debilidad
cuanto más te escurres más sé encontrarte
solo quiero dejarme caer en ti y estar high
en esa dicha, en la frialdad ardiente de tu tacto.
mi melancolía no es fragilidad,
aunque podrías romperme.
Sabiendo que siempre te enfrento, déjame entrar.
Lo has hecho tan bien
no estoy bien sin ti, no del todo.
Me tienes ¿por qué no me retienes?
Esto no es suficiente.
Reencuentro: Alexia S. D.